Por Gabriela Sosa
Los animales fueron carneados en la madrugada del miércoles y encontrados en las primeras horas del día, a casi 2 kilómetros de las inmediaciones de la propiedad que el empresario tiene en Santa Rosa.
Los cuatreros llegaron en una camioneta y previo a romper el alambrado enclavado hacia el sector Este, del campo ubicado en Ruta 7 y Los Plumeros, se llevaron dos de los animales más valiosos que tiene en su propiedad Walter Sotto.
Según el empresario santarrosino, quien hace tres años tiene su finca y su campo en el departamento a la vera de la Ruta Nacional N° 7, entre la Villa Cabecera y Las Catitas, se trata de caballos criollos puros de pedigree, un picazo y un gateado.
“Tenían hasta ADN. Estos caballos eran reproductores machos criollos, con una mezcla de sangre chilena y brasilera. La bronca es que detrás de todo esto, hay 5 años de laburo que uno no lo recupera más. Uno trae los padres para reproducirlos, poder juntar la sangre de los puros, mejorar paso a paso todo genéticamente y que suceda esto genera mucha impotencia. El miedo es que ahora me roben otros animales, quizás el resto los saque de allí” afirmó el empresario.
En este caso, los delincuentes mataron a los animales disparándoles en la cabeza. Luego a campo abierto los carnearon, extrajeron la carne y abandonaron el cuero, la cabeza, los huesos y las vísceras.
En la zona de los campos, es costumbre que los cuatreros maten a los animales con total impunidad. Para el empresario del Transporte, el problema del abigeato va más allá de que sea un delito, tiene un crimen organizado, no solamente se matan y se faenan animales, sino que se venden, existe una oferta y una demanda que es absolutamente ilegal.
“Debemos tomar conciencia, porque evidentemente si alguien va a robar animales es porque hay un pedido y si hay pedido es porque hay gente que los compra y si alguien compra es porque hay demanda.
Entonces se deben ampliar los controles donde se pueda llegar a comercializar el animal, ya sea en rutas o carnicerías” dijo Sotto quién solicitó a las autoridades mayores controles en la cadena comercial
“Los tipos que han hecho esto, no han ido a matar animales para ver donde pueden vender la carne, sino que ya tienen todo previamente planificado. Allí, es donde hay que trabajar y al menos minimizar esta situación que no solamente pasa en Santa Rosa, sino en todas partes” expresó lamentándose sobre la situación.
Para Sotto las personas que mutilaron sus caballos “No son improvisados, tampoco rateros comunes, saben muy bien lo que hacen. Inclusive hace un tiempo me sacaron otros animales pero logramos junto a la policía recuperarlos. Sé que la policía está trabajando fuertemente y la gente debe estar atenta y si sabe algo hay que denunciar, porque solo así vamos a evitar que se produzcan otros casos como estos”.
Este flagelo, conocido comúnmente como cuatrerismo, azota a los propietarios de animales sobre todo en las zonas rurales. Se trata de una conducta considerada delictiva, prevista y penada en el artículo 163° inciso 1° del Código Penal Argentino, llamada también en términos legales abigeato.
“No hay perdón, hay mucha gente como yo que ama los caballos, porque son animales nobles, buenos, no se resisten a la gente. Crié estos caballos desde que eran pequeños, realmente han hecho un daño terrible” sentenció.
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