miércoles, 23 de enero de 2013

EL SIAMES, EL PRINCIPE DE LOS GATOS


Historia y leyenda el gato siames


Muchas leyendas rodean al gato Siamés, pero existe un mito particularmente simpático que asocia la creación del Siamés con el viaje del arca de Noé . 
En una historia extraída de un libro llamado Animals and Man ( Los animales y el hombre ), de George Cansdales, se da una descripción del aburrimiento de los animales en el Arca durante el largo viaje, y en sus maneras de aliviarlo. El Siamés dice, se originó a través de la cruza de especies, con el mono enamorándose con el león quien produjo el primer gato. Este tipo de apareamiento deja mucho a la imaginación, y la historia dice que esto dio nacimiento al Siamés, que se dice que “tiene los atributos de un mono y la bravura del león”. 
Según registros escritos, éstos revelan que el los gatos Simeses, en su país de origen, eran venerados como guardianes de los templos. Cuando una persona de alto rango moría, era costumbre seleccionar unos de estos gatos para recibir el alma de la persona muerta. El gato era luego sacado de la casa real y enviado a alguno de los templos para pasar el resto de sus días viviendo una vida ceremonial de gran lujo, con monjes y sacerdotes como sirvientes. Estos gatos tenían fama de ser alimentados con las mejores comidas en plato de oro, y de acostarse en cojines hechos de los materiales mas opulentos, que habían sido provistos por los parientes de los difuntos, en un intento de recibir una gran fortuna y bendiciones. Una vez que los mismos se volvían gatos de templo, se suponían que debían disponer de poderes especiales y podían interceder por el alma de la persona muerta. 
Años atrás, características tales como ojos cruzados y cola curva eran vistas como características de la raza, y muchas leyendas existen sobre su origen.
Se dice que una princesa de la Real Casa de Siam usaba su cola de gato como soporte de su anillo mientras se bañaba. La curva de la cola del gato evitaba que los anillos se caigan y se pierdan. Otra leyenda tiene en cuenta tanto los ojos cruzados, como el desarrollo de la cola angulosa. Una vez, cuando todos los hombres de Siam dejaron sus casas para defender su reino, sólo dos gatos – un macho Siamés llamado Tien y una hembra Siamesa, llamada Chula, permanecieron dispuestas a resguardar la copa de oro de Buda en el templo sagrado. El gato macho se volvió bastante inquieto y , luego de aparearse con la hembra Siamesa, la dejó dispuesto a encontrar otro sacerdote para que cuide el templo. La hembra, aparentemente, estaba tan abrumada por la responsabilidad de cuidar el tesoro de Buda, que nunca sacaba la vista de la copa, envolviendo su larga cola alrededor de su base para evitar el robo de la misma en caso de que se durmiera. A medida que el tiempo pasaba esperando el retorno de Tien con un nuevo maestro, ella no pudo soportar mas el nacimiento de sus gatitos, a quienes dio a luz con las mismas características físicas que ella misma había adquirido durante su tiempo de guardia – una cola angulosa y ojos cruzados. Sólo ocasionalmente, aún actualmente, los gatitos nacen con estas características – por lo tanto las leyendas se mantienen vivas . 
Algo de historia.
El siamés es una de las razas claramente reconocida como orientales. Los orígenes exactos de la raza son desconocidos, perso se cree que proviene del sur de Asia, y se cree que es descendiente de los gatos de los templos sagrados de Siam ( hoy Tailandia ) . En Tailandia, donde estos son una de las razas nativas, se los denomina Wichien-maat ( un nombre que significa "Diamante de la Luna"). En el siglo XX, los gatos siameses se volvieron una de las razas mas populares en Europa y América del Norte.
El gato llamado siamés en Occidente, es una de varias razas provenientes de Siam descriptas e ilustradas en manuscritos llamados “Tamra Maew” ( Poemas de gatos) , que se estima que fueron escritos hacia el 1700. 
La raza fue vista por primera vez fuera de su hogar en Asia en 1884, cuando Owen Gould llevó a Inglaterra un par de gatos siameses desde Siam como regalo para su hermana Lillian. Estos dos gatos, Pho y Mia, padre y madre, son el primero y segundo en el Registro de Gatos Siameses Británico, pero no tenían ningún “pedigrí”, sus señas son “desconocido, importado de Bangkok”. La progenie de Pho y Mia, Duen Ngai y Kalahom y Karomata, fueron al Palacio de Cristal en 1885 y excedieron a todos sus competidores, pero desafortunadamente murieron antes de la exhibición. 
Al año siguiente, otro par de gatos ( con sus crías ) fueron importados por una Sra. Vyvyan y su hermana. Comparados con los gatos británicos de pelo corto y persa, que eran familiares a la mayoría de los británicos, estos siameses importados eran mas largos y compactos en su tipo de cuerpo, tenían cabezas menos redondeadas, con hocico cuneiforme y grandes orejas. Estas diferencias y el tipo de pelaje que no había sido antes visto por occidentales, produjo una fuerte impresión- llegándose al caso de que uno de los primeros en verlo dijo del mismo “ una anormal pesadilla de gato”. Pero estos sorprendentes gatos ganaron además algunos fanáticos devotos, y a lo largo de los años siguientes los adinerados importaron un pequeño número de éstos animales, que juntos formaron la raza originaria para todo el resto de la raza en Gran Bretaña. Se cree que la mayoría de los siameses en Gran Bretaña hoy son descendientes de aproximadamente once de éstos animales importados. 
Los gatos siameses importados eran, como sus descendientes en Tailandia hoy, de mediano tamaño, de cuerpo mas bien largo, muscular, elegantes con cabezas en forma de cuña moderada y orejas que eran comparativamente largas, pero en proporción con el tamaño de la cabeza. Los gatos variaban desde tamaños generosos a esbeltos, pero no en extremo en ambos casos. 
Entre 1884 y el fin del siglo, un número considerable de gatos Siameses fueron importados hacia Inglaterra y se encuentran registrados en los Registros de Siameses Británicos. La señora Forestier Walker, una de las miembro fundadoras originales del Club de Gatos Siameses en Inglaterra, poseía Tiam O'Shian IV, que fue un ganador de premios en las exhibiciones del Palacio de Cristal de Londres de 1900 y 1901. 
Probablemente el primer gato Siamés en Estados Unidos llegó durante la presidencia de Rutherford B. Hayes (1877-1881), como regalo del cónsul de Estados Unidos en Bangkok a la esposa del presidente, la Sra. Lucy Webb Hayes. La primera dama fue notificada de que había una gata siamesa para ella que había llegado de Hong Kong el 3 de enero de 1879. La misma fue transportado a San Francisco en la SS Belgic, impulsada a vapor, con cargos pagos por el cónsul en Bangkok. La gata había sido colocada bajo cargo de los gastos del barco hasta San Francisco, y desde allí fue enviada por expreso hasta Washington. Luego de la entrega asegurada a la Casa Blanca, la gata fue bautizada como Siam, y pronto se transformó en la favorita mas admirada. 
Entre los años 50 y 60, a medida que el siamés crecía en popularidad, muchos criadores y jueces de exhibición comenzaron a favorecer al aspecto mas delgado o esbelto, que como consecuencia del resultado de generaciones de cría selectiva, produjo gatos con cabeza estrecha, huesos largos finos; eventualmente el moderno gato de exhibición fue criado para ser extremadamente alongado, con cuerpo delgado y tubular, una cola muy larga y delgada que se estrecha en un punto y una cabeza larga, estrecha en forma de cuña que disponga en su parte superior de orejas largas y anchas. Las principales organizaciones de criadores de gatos alteraron el lenguaje y la interpretación de los estándares oficiales a favor del nuevo tipo aerodinámico de siamés, y una minoría de criadores que estaban con el estilo original encontraron que sus gatos habían dejado de ser competitivos en los desfiles de exhibición . 
Los gatos han sido representados en películas, una de las mas notables producida por Walt Diney, “Un gato del FBI” con Hayley Mills como protagonista, y la película de dibujos animados “La Dama y el Vagabundo”. 
Los gatos siameses han sido además usados extensivamente en anuncios publicitarios a lo largo de los años, así como en muchos sellos postales alrededor del mundo. 
Los gatos siameses son típicamente de larga vida, 15-20 años en promedio, y mas de 20 no es inusual. 
La personalidad de los gatos siameses es muy extrovertida y cariñosa. También se los considera muy exigentes de atención sobre sí. Los siameses pueden ser muy maullones, quizá no sea la raza correcta si lo que no se busca es una mascota ruidosa. Mantendrán una larga conversación con usted y son extremadamente inteligentes. Muchos siameses son conocidos por recoger sus juguetes favoritos, y sin que su dueño deba enseñárselo, al contrario ellos le enseñaran a usted ! . Los gatos siameses son afectos a los abrazos, y si se los permite dormir en su cama, probablemente opten por dormir bajo las sábanas con usted. Los siameses son trepadores. El mío puede siempre encontrar el punto mas alto en la habitación. No busque un siamés si usted encuentra desconcertante la idea de que dos grandes ojos azules de siamés lo estén observando desde la parte superior del refrigerador !.. Los gatos siameses lo seguirán de habitación a habitación, ya que ellos quieren ser su humano favorito.
Si usted alguna vez escuchó que los “siameses son malos”, tómelo como un mito; estos son los animales mas cariñosos que usted haya tenido alguna vez. El siamés, como raza, es muy cariñoso y afectuoso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario